“¿Recuerdas la primera flor que te regalé?

Así empezó todo. Sin dramáticas reservas para cenar ni costosos ramos de flores, sólo una tranquila noche en casa, dos copas de vino y una cajita que apenas hizo ruido al abrirse.

En el interior: una delicada pulsera, tejida con flores de esmalte y cepillada con cálido oro de 18 quilates.

Me miró desconcertada al principio, luego quieta, luego sonriente.
Y entonces, con los ojos brillantes, susurró:
“Te acordaste de las flores de nuestra primera cita.”


La pulsera que contó nuestra historia

No todo el mundo regala flores en la primera cita. Pero yo lo hice.
Un ramo de rosas rosas y lavanda silvestre: incómodo, atrevido, sincero. Ella se rió entonces, se burló de mí por ser “demasiado romántico para un ingeniero de software”.
Ahora, seis años después, volví a regalarle esas flores.
Pero esta vez, forjadas en fuego y amor, inmortales en esmalte.

La pulsera los lleva todos: suaves pétalos rosas, margaritas de oro pálido, una única enredadera violeta. No es sólo una joya. Es el recuerdo de un comienzo conservado.


Por qué no podía dejar de tocarlo

Durante toda la tarde, sus dedos rozaron las flores como si estuvieran vivas.
“Esta se parece a la que prendí en mi diario”, dijo.
No lo había sabido.

La pulsera no era ruidosa. No brillaba como los diamantes.
Pero tenía presencia, gravedad emocional. Un lenguaje privado que sólo nosotros entendíamos.

Se lo puso para ir a la cama.
Se lo puso para ir a almorzar con su hermana.
Se lo puso incluso para teclear en su portátil al día siguiente.

No gritaba “aniversario”.
Susurraba “sigue creciendo”.


Una nota para el que está comprando ahora mismo

Si te preguntas si le gustará-
No le gustará.
Le encantará.

Porque esto no es sólo una pulsera. Eres tú mostrándole:
Te diste cuenta.
Te acordaste.
Nunca dejaste de florecer.


Los detalles (porque importan)

  • Metal: chapado en oro de 18 quilates, resistente a la decoloración e hipoalergénico.
  • Trabajos en esmalte: Flores pintadas a mano, cocidas al horno para mayor profundidad y durabilidad.
  • Simbolismo: Rosa para el afecto, lavanda para la gracia, oro para el valor duradero.
  • Clava: Cadena ajustable con un charm en forma de flor
  • Embalaje: Caja de jardín de terciopelo con una nota de flores secas
  • Opción de mensaje personalizado: Sí

Aniversario Regalo Consejo de alguien que acertó

Escribe una nota corta con ella-no una carta larga.
Sólo un recuerdo. Una frase que olvidó que recordabas.

“Hace seis años, te burlabas de mí por las flores. Hoy, hice que duraran.”
Eso fue todo lo que necesité…